- Un anciano llamó porque un producto para desatapar el desagüe le salpicó los ojos cuando lo vertió en un desagüe obstruido.
- Un niño de 5 años se pegó accidentalmente un dedo en la nariz con pegamento extra fuerte.
- Un niño de 3 años estaba jugando con esmalte de uñas y se lo puso en los labios como si fuera lápiz labial.
- El médico forense del condado llamó para saber si la inhalación de Orange Glo® puede causar la muerte.
- Se encontró a un niño de 3 años comiendo bolitas de veneno para ratas. (Son de un color verde azulado brillante) Le dijo a su mamá, “¡dulces!”
- Mientras gateaba por la casa, un niño de 11 meses se metió en la caja de arena para gatos y pudo haber ingerido arena y/o heces de gato.
- Un hombre llamó porque el café que compró en su gasolinera local sabía a productos químicos de limpieza. Estaba preocupado por lo que pudo haber ingerido.
- Se encontró a un niño de 13 meses chupando una toallita desinfectante Clorox.
- Un niño de 2 años mordió el medicamento Strattera de su hermano mayor. La mamá pudo quitarle media pastilla de la boca.
- Un granjero acudió a la sala de emergencias después de pincharse involuntariamente con una jeringa que contenía una vacuna para cerdos.
- El personal de la sala de emergencias de un hospital infantil llamó porque un niño agarró el pastillero de su abuela y faltaban un comprimido de oxicodona y 2 de glipizida.
- Un enfermero escolar llamó porque una estudiante de secundaria de 16 años derramó hidróxido de sodio en su brazo durante un experimento de química.
***Los especialistas del IPC también realizaron 19 llamadas a hogares y hospitales para hacer un seguimiento de la evolución clínica de los pacientes por los que nos habían consultado previamente.
Esto es solo una hora, lea el resto de los casos del día de 24 horas (enlaces a continuación). ¡La prevención no tiene precio! Haga clic aquí para obtener un curso educativo gratuito en línea sobre prevención de intoxicaciones y/o materiales educativos.